Tras dos años de sostener una propuesta inspirada en la cocina criolla plant based, Seibo presenta un menú renovado por el chef Pablo von Quintiero, que se enfoca en recetas andinas, sabores del NOA y productos regionales. La nueva carta de este local ubicado en pleno centro de Recoleta está pensada para distintos momentos del día y la semana: incluye desde un menú de mediodía y noche hasta alternativas de brunches y meriendas, así como una sección especial de vinos. Con cada uno de sus platos, Seibo se propone respetar los orígenes de la cocina argentina mientras traza un compromiso con la sostenibilidad y la salud, brindando opciones nutritivas y frescas.
Desde sus inicios en 2022, cuando dos amigos de la infancia y un socio gastronómico e influencer de recetas veganas iniciaron este proyecto, transitaron distintas instancias de aprendizaje y autodescubrimiento que ahora los llevan a redefinir su identidad y ampliar su espectro a través de un trabajo colaborativo con pequeños y medianos productores de Argentina para afianzar la relación entre la capital y el interior del país: “Vamos a trabajar con productores seleccionados que comunican a Buenos Aires con el resto de las provincias apoyando las riquezas naturales de nuestro país. Queremos traer las historias de nuestros orígenes a las mesas porteñas”.
Este renovado propósito se acopla con la estética que caracteriza a Seibo desde sus comienzos, la cual evoca al norte argentino. Su diseño estuvo a cargo de la firma Prima Arquitectos en colaboración con un amigo oriundo de la provincia de Tucumán para recrear los paisajes de esa región en cada uno de los detalles arquitectónicos y estilísticos. El local de tres plantas cuenta con un amplio salón y una barra donde luces tenues configuran una atmósfera relajada y cálida. El recorrido continúa por un piso intermedio donde se ubica la cocina a la vista, que permite presenciar el compromiso y la dedicación en la construcción de los platos. Finalmente, en la tercera planta se encuentra la segunda barra junto con un patio interno y una terraza con vista al cementerio de Recoleta. La ambientación se compone de ladrillos a la vista, coloridos murales, muebles y decoraciones de hierro, cemento y madera, que logran un ambiente norteño en plena capital.
En cuanto a su nueva carta, está enfocada en ofrecer una propuesta otoñal compuesta por platos elaborados con vegetales frescos, estacionales y de origen local que recrean la cocina autóctona argentina y las tradiciones regionales.
Bajo el nombre “almuerzo andino”, cada mediodía se puede disfrutar de una milanesa de gírgola o bife de portobello parrillero acompañado de cuatro posibles guarniciones: ensalada de hojas verdes o de quinoa, papines andinos o puré de coliflor. Y también de empanadas de humita con salsa yasgua picante de tomates sin cocción y lima, guiso carrero, ensalada o tarta del día.
Durante la noche, se podrán degustar cuatro entradas distintas —tortilla santiagueña con manteca de frutos secos; sopa de yuca; empanadas de humita y provoleta de topinambur (similar a la papa)— y tres alternativas de principales —milanesa de girgola con ensalada; sándwich pebete de hongo enoki con salsa criolla; y bife de portobello parrillero con chimichurri y puré de coliflor—.
En cuanto a la sección de postres, están disponibles en ambos servicios y constan de helado de uva torrontés con arce, panqueque flambeado de dulce de leche de frutos secos, churro de chocolate con azúcar mascabo y frutas de estación.
Para acompañar estas opciones, poseen distintas propuestas de bebidas. Por un lado, cocktails de autor, entre los que destacan el Tereré tonic (elaborado con gin, tónica, pomelo rosado, yerba mate, peperina y cedrón), el Chivatiau (amargo obrero con moscatel y soda) y el vino caliente (un especial de invierno hecho con malbec, azúcar de caña, naranja, anís y canela). También cuentan con vinos de las siguientes etiquetas: Serbal (Rosé y Malbec, que además están disponibles en copa), Punta de Flecha, Galileo, Catalpa, Krontiras, 4 gatos, Montleury y Carrascal (también disponible en copa).
Además, todos los días tienen a disposición un brunch que incluye medialunas, chipá de queso y dulce de guayaba, tortilla santiagueña, tostado de humita, plato con frutas de estación y quinoa con leche, manzana y canela. Para acompañarlo, se puede optar por diversas opciones, desde espresso, ristretto o lágrima, hasta té negro con canela y anís o de cedrón y naranja, o un submarino.
Con esta nueva propuesta, Seibo renace como un proyecto a base de plantas que no solo busca profundizar en la cocina autóctona y las tradiciones regionales a través de platos nutritivos y frescos, sino que además se propone trabajar con productores de distintas localidades para traer los orígenes de Argentina a sus mesas porteñas.
Seibo
Azcuénaga 1876 – Recoleta.
Horarios: lunes de 11 a 19 h, martes a jueves de 10 a 00 h, y sábados a domingo de 11 a 01 h.
Teléfono: 1149379648
Instagram: @seibo.ar